OPTIMICE LA CARGA DE SU HOGAR CREANDO LAS MEJORES CONDICIONES DE CARGA
Uno de los factores más importantes a considerar al cargar un vehículo eléctrico es la velocidad de carga, que puede verse afectada por varios factores. Estos factores incluyen la capacidad de la batería, la potencia del cargador, la temperatura, el estado de carga y el modelo del vehículo eléctrico.
La capacidad de la batería es un factor crucial que afecta la velocidad de carga del vehículo eléctrico. Cuanto mayor sea la capacidad de la batería, más tardará en cargarse. La potencia del cargador también es importante, ya que determina la rapidez con la que se carga el vehículo. Cuanto mayor sea la potencia del cargador, mayor será la velocidad de carga.
La temperatura es otro factor que afecta la velocidad de carga de los vehículos eléctricos. Las bajas temperaturas pueden ralentizar los tiempos de carga, mientras que las altas temperaturas pueden acelerar el deterioro de la batería.
El estado de carga de la batería también es importante para la velocidad de carga. Los vehículos eléctricos consumen más energía cuando su carga está entre el 20 % y el 80 %, pero cuando la batería está por debajo del 20 % y por encima del 80 %, la velocidad de carga se ralentiza.
Finalmente, el modelo del vehículo también puede afectar la velocidad de carga, ya que cada modelo de VE tiene diferentes capacidades de carga. Comprender estos factores puede ayudar a los propietarios de VE a tomar decisiones informadas sobre cuándo y dónde cargar sus vehículos, y a garantizar que aprovechen al máximo sus VE.
SALIDA DE POTENCIA DEL CARGADOR
La potencia de salida del cargador es uno de los factores más importantes que afectan la velocidad de carga de los vehículos eléctricos. La potencia de salida de un cargador se mide en kilovatios (kW). Cuanto mayor sea la potencia de salida, mayor será la velocidad de carga. La mayoría de los cargadores públicos del Reino Unido tienen una potencia de salida de 7 kW o 22 kW, mientras que los cargadores rápidos tienen una potencia de salida de 50 kW o más.
La potencia del cargador determina la velocidad de carga de la batería. Por ejemplo, un cargador de 7 kW puede cargar una batería de 40 kWh del 0 al 100 % en unas 6 horas, mientras que un cargador de 22 kW puede hacer lo mismo en unas 2 horas. Por otro lado, un cargador de 50 kW puede cargar la misma batería del 0 al 80 % en unos 30 minutos.
Es importante tener en cuenta que la velocidad de carga puede estar limitada por el cargador integrado del vehículo. Por ejemplo, si un vehículo tiene un cargador integrado de 7 kW, no podrá cargar a mayor velocidad incluso si está conectado a un cargador de 22 kW.
También cabe destacar que la velocidad de carga puede variar según la potencia del cargador y la capacidad de la batería del vehículo. Por ejemplo, un cargador de 50 kW podría cargar una batería pequeña más rápido que una grande.
En el caso de los cargadores domésticos de vehículos eléctricos, la velocidad suele estar limitada a 7,4 kW, ya que la mayoría de los hogares tienen una conexión monofásica. Las empresas y otros lugares que requieren cargas más altas probablemente tengan una conexión trifásica. Estos pueden cargar a mayor potencia y, por lo tanto, a mayor velocidad.
Hora de publicación: 03-abr-2024
